Va terminando el año y en nuestro país empieza la temporada estival, el calor y la playa. Pero qué hay de aquellos que aprovechan esta temporada para incurrir en aventuras de alta montaña donde hay bajas temperaturas? Te ofrecemos en Sherpalife una guía para montañismo en bajas temperaturas, con los consejos más importantes para una salida de esta clase.

Preparativos

Un requisito básico y que muchos olvidan: un botiquín. Quizás creas que es una exageración, pero es algo básico a la hora de cualquier aventura seria que implique distancias considerables de un hospital. Nunca estará de más!

Elige una mochila correcta. Este es un punto importantísimo, pues la mochila será un factor sustancial para determinar si tu viaje es un éxito o un fracaso. Elige una mochila con la que puedas moverte con seguridad, que te sea cómoda y no dañe tu espalda cuando camines largos trayectos.

Y para la comida, no olvides llevar un hornillo. Lleva una cantidad de reservas de gas adecuadas y encendedor o mechero  extra por si necesitaras.  Un  último detalle: lleva pilas, pues quizás las necesites para tu lámpara frontal o algún otro dispositivo (recuerda botar las agotadas en un depósito y no en la calle o la naturaleza!)

Ben Kimball // flickr.com/benkimball

Qué ropas usar?

Cuando debas hacer actividad física en la montaña hay un principio que debes conocer: las tres capas. Es mejor llevar tres capas aislantes y ligeras que una o dos gruesas y pesadas, debido principalmente a que entre cada capa se forman cámaras de aire aislante, y además de esta forma es más práctica para poner o quitarte ropa con facilidad. Las capas son las siguientes

• Primera capa: aquella que está en contacto con el cuerpo. Usa una camiseta y pantalón térmicos.
• Capa intermedia: polar o alguna prenda de este material.
• Capa exterior o tercera capa: la que está directamente expuesta al aire libre: chaqueta, pantalón impereable.

A veces tendemos a creer que podemos prescindir de una de estas capas, ´por el buen tiempo que puede haber en el lugar al que nos dirigimos, pero siempre es aconsejable llevar al menos una prenda de cada una. Al levantarnos, no será necesario utilizar toda la ropa, y nuestro cuerpo se irá aclimatando de forma progresiva y suave. Si utilizas todo de una vez durante todo el día, tu cuerpo estará sudando a los 15 minutos y será una pérdida innecesaria de líquido y energía.

Sobre las manos y la cabeza, no olvides mantener tu gorro y guantes cerca de ti. Si se te pierden, podría tratarse de una gran desgracia. En vez de dejarlos en el suelo cuando necesites quitártelos, ponlos en algún bolsillo de tu chaqueta o en tu mochila, así minimizarás el riesgo de extraviarlos. Y también recuerda llevar una protección contra el calor, como una gorra, pues la insolación podría presentarse no inmediatamente, sino al final de tu día.

Complementos

Gafas de ventisca: Si no las llevas cualquier paso de niebla o ventisca será un problema considerable! Si piensas adquirir unas te recomendamos que sean de doble pantalla para que no se empañen.

Botas. Los pies son fundamentales para mantener la temperatura del cuerpo y si tienes una protección poco adecuada, será muy fácil que tu aventura fracase. En este punto te aconsejamos que inviertas dinero, unas botas de piel de buena calidad quizás sean caras, pero no te arrepentirás la momento de estar en la nieve. Necesitas en este tipo de bota un buen grado de rigidez longitudinal y mayor de transversal, que aporte protección y seguridad en terrenos rocosos o nevados, con o sin crampones.

Cuerda: elemento primordial en la cadena de aseguramiento, del mismo tipo que la utilizada para escalada general, dinámica y homologada.

 Kitty Terwolbeck // flickr.com/kittysfotos

Para efectos de seguridad

Piolets: pueden ser uno o dos, dependiendo de la verticalidad del itinerario. Uno de ellos deberá portar la pala y el otro el martillo, para que puedas introducir los anclajes de seguridad cuando se progresa en cordada. Sobre el típico piolet de alpinismo, los modelos para escalada en hielo tienen un diseño un poco más técnico, de forma que sea más ligero y que te ahorre esfuerzos. Deben estar amarrados con una dragonera o cinta para unirlo a la muñeca o al arnés, para que así también sirva como punto de reposo o autoaseguramiento.

El arnés: progresar en cordada en terrenos dificultosos será imposible sin un buen arnés. Debemos anudar a este la cuerda, y existen algunos específicos para nieve y hielo, con características técnicas que harán más fácil colocarlos o quitarlos.

Los crampones. Estas son estructuras metálicas que terminan en doce puntas y que se adaptan a la suela de tus botas. Son primera necesidad si necesitas caminar sobre nieve dura o hielo, pues de no tenerlos te resbalarías. Los más multipropósito son los articulados con sistema de fijación por correas, frente a los rígidos con sistema de fijación automática sin correas o semi automática.  Los crampones deben ir siempre equipados con antizuecos, que son laminas de caucho que se acoplan a medida debajo de la planta del crampón. Su utilidad es evitar que se acumule excesiva nieve al caminar, pues ésta podría llevar a formar una masa compacta que nos hiciera resbalar.

Casco: está de más explicar por qué es necesario. Usa uno cómodo y mantenlo firmemente atado en pendientes empinadas de nieve dura o hielo.

Con estos consejos estás listo para la aventura, que la disfrutes!